De primeras parece obvio: lo de que es de todas lo gestionamos todas juntas. Pero creo que no lo estamos practicando bien. En ocasiones decidimos cosas comunes por separado y probablemente no nos demos ni cuenta.
Un suponer: acudo a la asamblea de Equo Asturias con otras 60 personas para hablar de política energética. Decidimos que el déficit tarifario debe desaparecer paulatinamente en 5 años. 2 compañeras muy implicadas en el sector nos explican que esta medida beneficiaría a las renovables. Al día siguiente salimos en prensa con la propuesta y nos felicitan, por ser valientes.
Al mismo tiempo, la gente de Equo en Zamora discute el mismo tema. Son 30 personas, sin expertos en energía, pero con sensibilidad ante las dificultades económicas de las familias frente los crecientes precios de la electricidad. Creen que hay que mantener el precio bajo por encima de todo, pese al déficit. Sacan una nota de prensa y les felicitan, por ser sensibles.
Situación: 2 asambleas de Equo con 2 posicionamientos válidos, apoyados por su entorno, pero opuestos. Y si hay más asambleas y características locales diferentes, más posicionamientos habrá. ¿Hasta aquí parece todo normal?
El error: fijar un ámbito de decisión inapropiado
En mi opinión el error está en posicionarse sobre un tema estatal en una asamblea territorial. Si el tema (la política energética estatal) nos concierne a todas, el ámbito de decisión debería de ser todo Equo en conjunto, y no cada asamblea de forma parcial. Si el debate fuese sobre política energética territorial, entonces sí, estaríamos en el ámbito adecuado.
El funcionamiento parcial nos aboca a la democracia representativa. Armonizar múltiples opiniones territoriales para así encontrar la opinión estatal requiere nombrar representantes y negociaciones entre ellos. La decisión ya no se tomará en base a los expertos en energía o a la preocupación por la economía familiar, sino en base al peso relativo de cada territorio: tantos afiliados tenemos, tanto pesan nuestros argumentos.
El caso presentado sobre política energética es ficticio, pero ya se han dado otros ejemplos análogos:
- Equo territorial de la comunidad X pide al gobierno estatal soluciones para la crisis de vivienda. ¿No debería de hacerlo Equo estatal?
- Equo en la comunidad Y opina a favor de sumarse a una convocatoria de Huelga General. ¿Podría darse el caso de que unas asambleas apoyasen y otras no?
- Equo de la provincia Z se suma a una Plataforma contra la crisis que agrupa a varios colectivos de la provincia. Esta Plataforma decide mantener su autonomía con respecto a otras Plataformas similares en otras provincias. ¿Para poder tener su propia opinión sobre temas estatales?
La alternativa: una estructura horizontal estatal
Equo ya tiene herramientas funcionando que solucionan esta situación, que proporcionan una solución más horizontal, con menos intermediarios, y promueven la participación de toda aquella persona que lo desee.
En el ejemplo presentado sería el grupo de trabajo de Energía, de carácter estatal, el encargado de discutir el tema y ofrecer un posicionamiento. En este grupo estarían todos los interesados en Energía de todos los territorios, así como todos los expertos, independientemente del territorio al que pertenezcan.
Es importante que todos los territorios estén bien representados en los grupos. Probablemente al hablar de política pesquera se escuchará más a la gente de Galicia, en los asuntos mineros a la de Asturias y otros territorios mineros, en política de paz a la gente de Euskadi. Pero la óptica y la lógica del debate son estatales, y no territoriales. No es un “qué hay de lo mío”, sino un “qué hay de lo nuestro”.
La autonomía de los territorios
Este planteamiento tiene un corolario interesante. Si lo que nos concierne a todos lo decidimos entre todos, cuando hablamos de política energética en Asturias, ¿quien decide? Pues Equo Asturias, de forma independiente.
Es decir, es un modelo que favorece una independencia muy alta de las asambleas territoriales en su ámbito. La política energética de apoyo a la energía eólica la decidimos a nivel estatal. Ahora, si la cuestión es que se instale otro parque eólico en plena sierra del Sueve y urbanizar de paso medio monte, pues será en Asturias donde decidiremos si estamos de acuerdo o no.
Este modelo choca con ideas aprendidas
Nuestra asamblea territorial no debería de tener opinión sobre todos los ámbitos. Esta frase choca con ideas que he aprendido: me obliga a desaprender algunas. ¿Cómo es posible coartar la capacidad de opinión de una asamblea? ¡Deberíamos de poder opinar de todo!
Si choca con lo que tengo en mente es porque considero que mi asamblea territorial es mi única vía de opinión decisión ¡no puedo cortarla! Pero tengo que darme cuenta de que los grupos de trabajo estatales me abren precisamente más vías de opinión decisión, y las colocan en el ámbito adecuado (el estatal) y con los compañeros de debate adecuados (todos los interesados por la política energética de Equo).
Se limita por tanto el ámbito de opinión decisión de la asamblea territorial, pero se mejoran las posibilidades de opinión decisión de las personas individuales:
- Quiero tomar una decisión sobre la política asturiana: voy a Equo Asturias
- Quiero tomar una decisión estatal sobre política energética: voy al grupo estatal de Energía
- Quiero tomar una decisión sobre política energética en Asturias: voy al grupo territorial sobre Energía, si existe.
El resultado es una mejor organización y mayor eficiencia a la hora de canalizar opiniones y tomar decisiones en conjunto.
Llevar la discusión a un grupo temático hace que el debate se base en los aspectos concretos. Si se mantuviese dentro de un grupo territorial, el debate estaría más centrado en la dinámica inter-territorial. Por tanto, delimitar los ámbitos de actuación de las asambleas ayuda a construir una organización basada en las personas.
De acuerdo con tu exposición, Rafa. Añado que, aún en las cuestiones cuyo ámbito de decisión esté en el ámbito autonómico, provincial o municipal, el posicionamiento de los Q territoriales no puede nunca contradecir los principios ideológicos o programáticos de EQUO plasmados en los documentos oficiales aprobados.
Yo creo que la exposición es muy buena y muy clara. Pero echo en falta una referencia a las directrices generales del partido. Cualquier decisión autonómica, provincial o local tiene que encjar perfectamente en las directrices del partido, y con ello entiendo que no podría haber decisiones locales opuestas. Si esto ocurriera es que las directrices del partido estarían mal planteadas, por falta de claridad o por falta de concreción.
Los grupos de trabajo entiendo que son herramientas para clarificar la postura del grupo sobre un tema concreto; una forma de marcar mejor las directrices.
David, Iago,
Si tuviéramos un “corpus ideológico” amplio y bien definido, sería más sencillo delimitar los temas, y desde un punto de vista práctico estaría más claro: esto se puede decir, esto no porque hay que hablarlo primero entre todas.
Asumo que este corpus aún no está lo suficientemente desarrollado, y por tanto nos quedan aun muchos debates, y que por tanto esas directrices estatales que los grupos han contribuido a conformar, aún no existen.
Excelente análisis Rafa. Creo que debemos potenciar los Grupos de Trabajo, tanto a nivel federal como a nivel territorial, y que estén “sintonizados” para que la sociedad no perciba nuestro mensaje como incoherente. El problema que veo es la escasez de tiempo que las personas activas en Equo tenemos para dedicarle a temas concretos, más allá del ámbito territorial y autonómico. En mi caso concreto, he intentado participar en algún grupo cuya temática me parece interesante, pero no daba abasto y acababa entorpeciendo mi labor en mi grupo territorial, por lo que no se realmente que posicionamientos tenemos como partido en dichos temas. Y claro, a la hora de plantear esos temas en las Asambleas Territoriales se pueden producir paradojas que lleven precisamente a lo que comentas: mensajes contrapuestos y confusión a la hora de transmitir una idea clara a la ciudadanía.
Buen apunte como un riesgo de este modelo: el que seamos pocos para tener a gente en cada grupo, en cada tema. Y apunto otro relacionado: el que las decisiones se tomen por un grupo de gente muy reducido, lo que las desvirtúa.
Creo que aquí caben dos reflexiones:
– Por un lado: si somos pocos y no llegamos a todos los temas: ¿es mejor callarse y asumirlo, o es mejor que sea la ejecutiva la que asuma la decisión?
– Por otro: si Equo tiene cerca de los diez mil simpatizantes, ¿cómo es posible que no tengamos gente suficiente para trabajar en los grupos?
Desde mi punto de vista la reflexión más productiva es la segunda. Hay que levantar todas las barreras a la participación de los simpatizantes.
Hola Rafa, muy buen análisis, pero coincido con José Luis en su opinión de las “personas activas”. Y tus preguntas al respecto son muy procedentes, pero yo he detectado, como coordinador de un grupo de Trabajo y de mi grupo Territorial, que desde la reforma de la equomunidad ha bajado sustancialmente la participación en los debates. El motivo, los simpatizantes deben pedir a su mesa territorial que, previa comprobación en el censo, les “registren” para poder postear. Muy poco gente se ha molestado en pedirlo. No se si hay mas gente que comparte este análisis pero desde mi punto de vista la reform, que pretendia minimizar a los trolls, ha tenido como daño colateral una pérdida de participación de los simpatizantes.
Como lo veis?
¡Hola, Rafa y demás lectores! Me ha llegado esta entrada colateralmente y coincido en lo acertado del planteamiento central.
Para contestar a Toni, basta decir lo que cualquiera ha podido observar del funcionamiento de la Equomunidad en cuanto a la participación del personal (simpatizante o afiliado): escasa, muy escasa participación.
Desde mi pertenencia y participación en el grupo Salud, os puedo decir que yo, al quedarme como mero simpatizante (me di de baja como afiliado), no he tenido ningún inconveniente en seguir el procedimiento para ser “reconocido” por la estructura Equo de mi territorio.
El que otras personas no se hayan molestado en cumplimentar ese paso creo que muestra, bien a las claras, no que el procedimiento no sea necesario y eficaz en sus objetivos, sino que las personas no tienen la motivación, las ganas suficientes como para participar activamente en los procesos en red de Equo.
Gracias Rafa (“ex-ojo que todo lo ve”) por tu labor.
Salud para ti y los tuyos.
Hola Silvano, Toni,
En este caso opino que requerir el DNI para participar es un barrera excesiva. Entiendo la postura de Silvano, y en efecto no es un trámite excesivo (siempre y cuando se haga ágilmente). Pero en una situación en la que quieres promover la participación, una medida como esa la frena. De hecho estoy dispuesto a promover que se retire, aunque dudo si ahora tenemos el interés que teníamos antes.
Veo lógica la propuesta. Opinar de asuntos estatales a nivel de grupo de Trabajo Específico refuerza esa opinión como Equo a nivel estatal y europeo y después a nivel territorial se refleja según las condiciones del territorio. Por ejemplo: En Canarias tenemos una lucha contra las prospecciones petrolíferas en nuestras costas; reforzaríamos nuestra posición si nos unieramos los territorios con el mismo problema. Tratamos del petróleo no y sí a las renovables siendo consciente que en otros territorios como Málaga, Tarragona, Baleares, etc…tienen la misma o parecida problemática (la fiebre del petróleo)..Si hubiera una opinión estatal todos los territorios emplearíamos esa (opinión) decisión como una sola voz y añadiríamos las especificidades concretas de nuestro territorio.
Siempre que no parezca que seguimos una disciplina de partido; si estoy en Equo es porque podemos opinar libremente dentro de nuestros ideales.
Igual que las prospecciones petrolíferas, estaría el tema del fracking. Es más eficiente tratar la problemática en conjunto que cada territorio por separado.
Tocas un tema muy interesante que es la “disciplina de partido”. Si fuésemos un partido tradicional, la disciplina de partido sería un proceso “de arriba hacia abajo” en el que una cúpula decide lo que se piensa, y el resto del partido acata. En Equo, siempre y cuando la toma de decisiones se haga “de abajo hacia arriba”, la postura del partido no está fijada por una cúpula sino por una mayoría.
Ahora: ¿es posible ir contra esa mayoría del partido? Cada uno que opine individualmente como quiera, pero a nivel de asamblea territorial, como apunta algún comentario anterior, no se podría. Y eso es cierta “disciplina” también.
Interesante tema análisis y debate.
El problema de los grupos de trabajo es la escasisima participación con lo que a la postre o te aburres o acaban decidiendo muy poc@s.
El problema es la participación, repito, pero ¿como solucionamos esto si somos tan pocos?.
A mi entender hasta que los GT no sean realmente tales no es mejor tu planteamiento, pero entiendo que si sería la mejor forma de funcionar en otras circunstancias.
Seguimos caminando
Un abrazo
María Merello Arvilla
Hola María,
En la respuesta a Jose Luis daba dos opciones: o bien no hablamos de según qué temas porque no tenemos gente suficiente, o bien dejamos que sea un organismo ejecutivo quien asuma esos temas hasta que tengamos gente.
Pero creo que sería mejor enfocarlo desde otro punto de vista. Porque el caso es que gente hay: en la Equomunidad hay registradas 7500 personas a día de hoy. ¿Por qué no están participando? Se me ocurren las siguientes razones:
– La Equomunidad no es todavía lo suficientemente fácil de utilizar
– El trabajo de los grupos no está suficientemente dinamizado
– Todavía hay quien le pone trabas al funcionamiento de los grupos (p.e. en la elección de coordinadores de área)
– El trabajo de los grupos no está dentro de las prioridades de Equo.
Todo eso son razones parciales, no creo que ninguna de ellas explique todo, pero sí que son parte de por qué de 7500 interesados, sólo un pequeño porcentaje participa activamente.
Muy de acuerdo con lo expuesto Rafa. Enhorabuena.
Coincido plenamente con lo planteado en el artículo pero me parece evidente que hay algo que no acaba de encajar para que este modelo funciona.
Por ejemplo, en Equo Madrid tenemos grupos de trabajo de ámbito autonómico. En principio siendo el Equo autonómico con mayor número de afiliadxs tenemos “masa crítica” para que estos grupos estén mínimamente dotados de personas con interés y que ello no reste fuerza a los distintos grupos locales en que se organiza la Comunidad de Madrid y a cuyas asambleas sí que acuden suficientes personas. Sin embargo en la práctica es poca la gente que participa en estos grupos de trabajo locales de forma regular.
Además de ser pocos es muy habitual que quien acude a las reuniones, sobre todo aquellas personas que lo hacen de manera más esporádica, planteen sin distinción alguna temas de ámbito estatal o incluso europeo cuando el cometido de ese grupo, en línea con lo que dice Rafa, tendría que ser tratar la temática del grupo pero en lo referente a la Com. de Madrid. Si cuando esto ocurre se le explica al compañero o a la compañera que existe un Grupo de trabajo sobre Derechos sociales u otro sobre Democracia y participación, de ámbito federal lo más habitual es que te expliquen que no usan la Equomunidad, que su disponibilidad es limitada y que su tiempo de activismo político lo utilizan sobre todo en acudir a reuniones presenciales, sobre todos las de su distrito/ciudad/pueblo.
En las asambles locales, por ejemplo la de Madrid Ciudad Centro, es bastante habitual que haya un importante grado de disgresión y acabemos hablando de temas que no están en el orden del dia (que si las eléctricas, la reforma educativa, corrupción, privatización de la sanidad, la ley electoral…) Y ocurre exactamente lo mismo: Cuando se sugiere que esos temas se trabajen en los GGTT locales si es de ámbito local o en los federales si es de ese ámbito, lo normal es que alguien acabe diciendo “Si yo estoy en un partido es para hablar de política y buscar soluciones y vengo al espacio más inmediato por cercano y por frecuente que son las asambleas de mi zona. No tengo tiempo para más”.
De alguna manera la gente como dedica un tiempo limitado a Equo se ve obligada a elegir y normalmente entre los distintos posibles espacios de participación elige al que se le da más importancia a nivel normativo, orgánico, etc… que son las asambleas de tipo territorial. Y al hacerlo espera que en ese espacio se trate de todo: Desde la mesa informativa que se va a montar ese domingo, el documento que ha llegado para aportaciones desde la Mesa Federal, del problema del ambulatorio de su barrio que van a cerrar, de la corrupción en el PP o de la privatización de la sanidad en la Com. de Madrid. Si luego el debate que se produce sobre estos temas no va a ninguna parte a muchxs no parece importarle (supongo que lo que se busca es más un espacio en el que expresar sus opiniones entre gente de ideología afín) y a los que sí les importa es posible que dejen de ir a las reuniones (a estas y a las de los GGTT).
Quienes sí trabajan de manera habitual en los GGTT (locales o federales) y que entienden y asumen el ámbito temático y territorial que les corresponde, rara vez son personas cuya única actividad en Equo sea esa. Normalmente somos aquellos que estamos más motivados/comprometidos o que tenemos mayor disponibilidad y que acudimos a las asambleas locales y además a las reuniones de los GGTT o que participamos en el espacio del grupo en la Equomunidad.
Como conclusión: Dos problemas por lo que el modelo que plantea Rafa no funciona:
-Lo virtual y lo presencial: Hay gente que no acaba de sentirse cómoda con el uso de herramientas virtuales y o bien no sabe o bien entiende que ha de elegir entre presencial y virtual y opta por lo primero. Hay que buscar la manera de explicar que son ámbitos complementarios y que determinadas dinámicas necesariamente deben tener una mayor actividad en lo virtual.
-El modelo de organización: Equo es una organización que prima lo territorial a lo transversal. Desde los Estatutos al protagonismo que las personas más significadas de Equo otorgan a lo territorial y el poco a los GGTT pasando por la excasa conexión entre los GGTT y otras instancias de Equo (MF, Patronato y Consejo Asesor de la Fundación, etc…) Si la gente percibe que lo importante es acudir a la asamblea local será eso lo que haga y como tiene un tiempo limitado dejará de participar en otros ámbitos percibidos como menos importantes. Habría que trasladar al conjunto de la organización que los GGTT tienen un papel relevante y destacado y que es lícito y que unx no queda excluidx si decide practicar un activismo principalmente centrado en su participación en un GT temático en detrimento de su presencia en su asamblea local.
Finalmente coincido en que las barreas a los simpatizantes en los GGTT en http://www.equomunidad.org presuntamente han solucionado un problema pero a costa de crear otro y que es algo a revisar.
Gracias por la crítica, Sergio, muy muy fina.
Creo que no vale con ir a las Asambleas a contar nuestra vida, opinar de todo, y quedarnos a gusto. Si estamos en política es para cambiar las cosas. Y como no tenemos todo el tiempo del mundo, hay que hacerlo de la forma más efectiva posible. Hablar de política estatal en un grupo local SIN luego mover ese tema a la instancia estatal es una pérdida de tiempo.
Dicho eso, creo que es nuestra responsabilidad como dinamizadores de grupos el “visualizar” a los grupos de trabajo, “desvirtualizarlos”, hacer reuniones presenciales de forma que esa gente que tiene interés por los temas, pueda implicarse y engancharse a los grupos así.
Rafa, Sergio,
los dos teneis razón. Como dice Rafa, no vale con ir a contar tu vida, pero lamentablemente eso es lo que ocurre como bien ha constatado Sergio. Mi vision al respecto? Es tarea de las mesas de coordinación intentar fomentar los debates y luego trasladarlos a la instancia correspondiente (mesa autonómica, Mesa federal, GGTT …). Entiendo que los miembros de las mesas se han presentado, han sido elegidos y muy probablemente estan en política por las razones que apunta Rafa (yo lo estoy), pero no es menos cierto que la gente va a las Asambleas o grupos locales “a desahogarse” y muy pocos se implican cuando toca arremangarse y currar en serio. Conclusión, estoy de acuerdo en que en las Asambleas locales/territoriales se puede tratar todo, y que la mesa correspondiente debe encargarse de trasladar los debates o las conclusiones a donde corresponda.
Muy buena exposición Rafa y se termina hablando de que no utilizamos equomunidad y asi es, ha descendido mucho la participación.
Parte del asunto tiene que ver con lo ultimo que expones.
Temas que no se siguen e igual los que participan se desencantan, si se suma lo primero expuesto cosas contradictorias ya se pierde uno.
Lo interesante es buscar la participación con los simpatizantes respetando a la gente como norma principal…todas opiniones son buenas.
Oportunísimas y acertadas reflexiones que ponen el dedo en la llaga en una cuestión todavía no bien resuelta en EQUO ni en la mayor parte de las organizaciones que se pretenden democráticas, horizontales y participativas: ¿cómo conseguimos la participación real y activa de la mayoría?. La voluntad está. Intentamos poner los medios y los instrumentos. Pero la realidad es tozuda: más allá de efervescencias efímeras (movilizaciones puntuales, campañas electorales, etc.) sólo un grupo reducido se mantiene activo día a día. ¿Tiene que ser así en los grupos humanos? ¿Podría ser de otra manera?¿Qué resortes o motivaciones tenemos que activar, qué barreras tenemos qué eliminar? Son preguntas que me hago cotidianamente en mi grupo provincial de EQUO, en las Asambleas, en la Equomunidad y en otros colectivos a los que pertenezco. Todavía no he encontrado la respuesta.
Salus, ¿y si hacemos un cuestionario y buscamos esas respuestas?
Por un lado es cierto que las dinámicas de participación (especialmente en Internet pero en la vida real también) tienen a caer en la regla del 90-9-1: 90 miran, 9 hacen algo, 1 hace mucho. Es algo normal y no hay que desesperarse.
Pero también es verdad que debemos aspirar a un 70-20-10, por ejemplo, o a otra distribución de la participación que implique más a la gente. Y no está claro por qué, no lo estamos consiguiendo.
Por tanto, dos ideas/propuestas:
1) Implementar en la Equomunidad un contador estadístico que nos diga en qué nivel de participación estamos. ¿90-9-1, 70-20-10, otro?
2) Elaborar una encuesta via GoogleDoc que pregunte a la gente de Equo si participa, si participaría más, qué le impide participar, qué le animaría a participar.
¿Quien se anima a elaborar preguntas para esa encuesta?
No creo que en Equo carezcamos de un cuerpo ideológico común.La columna vertebral – ecología politica, regenaración democrática y defensa del Estado del bienestar y derechos civiles y sociales- es plenamente compartida
Tampoco me da la impresión de que existan divergencias de calado en las actuaciones y posicionamientos de cada una de las Q territoriales, aunque puedan variar las prioridades y procedimientos de actuar de cada Q.
Sí que pienso que la última razón del apalancamiento de nuestro número de afiliados y simpatizantes y de la escasa participación de los que ya están dentro de la organización es la carencia de atractivo.Sí, mucha gente se va o no entra porque capta en seguida que por mucho tiempo y esfuerzo que se emplee, la trascendencia de las actuaciones llevadas a cabo será practicamente nula y eso desanima y descorazona.
Por ello, las soluciones deben venir por una revitalización de las Q territoriales en las que debe primar el activismo ecologista, ir de la mano de las asociaciones vecinales, de consumidores, salir a la calle, mesas informativas, contactos con medios de comunicación, asistencia a plenos municipales a manifestaciones, realización de acciones sorpresa,…
En definitiva. Equo debe permeabilizarse con la sociedad,estar presente en cada movimiento reivindicativo,en cada calle, en cada barrio, hacer de la militancia en equo algo que suponga el crecimiento personal y humano de cada uno de nosotros.
Como decíamos en los momentos iniciales de equo, ” Es posible hacer política con una sonrisa”.
Nacho Arozarena- Equo Madrid Ciudad Norte-
EL 15M GANA LAS LEGISLATIVAS EN ITALIA
El movimiento 5 estrellas, como la Mahou cara, a falta de 4 circunscripciones por escrutar sobre 61.446, ha ganado las elecciones en Italia, con 8.687.636 votos frente a los 8.641.906 del PD (más o menos, el PSOE italiano) y los nada desdeñables 7.331.326 del “psiconano”, que es como llama Grillo a Berlusconi.
El PD ha concurrido en coalición con otros tres partidos de izquierda domesticada que le aportan otro 4%, que le permitirá ganar el premio (tómbola, tomado del italiano tómbola, RAE) de una exigua mayoría del 0,3% sobre la coalición de derechas, tocándole 340 diputados, el 55% della Camera. El problema es que en el senado (PSOE, PP, Monti y Grillo) al final Monti no resulta decisorio y parece que sólo hay 2 cosas claras: 1) que el movimiento de Grillo no va a pactar gobierno con nadie (y por lo tanto parece que acuden sólo a legislar y controlar, el objetivo de la democracia directa) y 2) que nadie quiere retratarse con Berlusca, porque ya se oyen los gruñidos de las toghe rosse, una parte significativa de la magistratura que le tienen muchas ganas, por como les ha puesto en evidencia ante los ciudadanos, burlándose de sus procesos durante las dos décadas más destructivos que ha vivido este país.
¿Pero quien es este Grillo que se pasa de monologuista a político, sin pedir un duro a un banco; sin haber salido NUNCA en televisión(*); renunciando a los 100 millones de Euros que podría haber recibido su movimiento por ganarle las autonómicas a Berlusconi en su propia casa, Sicilia; dedicando el 75% del salario que correspondería a i grillini por entrar en parlamento y senado (de los 20.000 Euros/mes, se quedan sólo con 5.000 para vivir), a dar microcréditos a los emprendedores sicilianos; y sin pedir un duro a un banco, repito, con las manos libres, consigue un 25,5% de los votos de los italianos? (PD(PSOE-it): 29,5%, PDL(PP-it): 29,2%).
Por ilustrarlo rápidamente, Grillo podría tener un perfil parecido a otro compatriota suyo más conocido por nosotros, que es Leo Bassi. Con una bis cómica mucho más desarrollada y una exitosa carrera de 40 años por los teatros de toda Italia, este humorista político lleva toda una vida animando proyectos de los así llamados “utópicos”, apoyando iniciativas bien intencionadas como cuando se plantó en la puerta de la Fiat con una coche inventado por unos ingenieros suizos, que consumía un litro a los cien o molestando al poder comprándose una acción de la ENI para entrar a liarla en la junta de accionistas. Siempre ha tenido un interés muy marcado por la ecología, participando activamente en la plataforma NO TAV, un proyecto como diez aeropuertos de Castellón, en todos los sentidos, y encima demoledor para el medio ambiente de los valles que aquí se levantaron en armas.
Es por lo tanto un luchador individualista e incansable de 62 años, que ha hecho de su forma de defender sus ideas, su forma de vida. Y lo que nadie le puede negar, gracias exclusivamente a su talento y a su perseverancia (y últimamente su valor también). Pero, aunque sin Grillo, el movimiento no sería más que otro nanopartido de democracia electrónica, no se ha hecho caudillo de nadie, al menos de momento.
Para que os hagáis una idea gráfica sobre el movimiento 5 estrellas, durante el 15M, hubo un momento en que se organizaron asambleas en ciudades europeas y Milán tuvo la suya. En Duomo nos juntamos, un megáfono, como 200 erasmus españoles y otro tanto de italianos, diría yo que casi todos provenientes de los centros sociales de la ciudad: cuadros comunistas bien formados. Cuando me iba con la bici, pasé al lado de cuatro italianos de los que habían estado en la asamblea y, por las cosas que allí se dijeron y sucedieron, largas de contar, uno me soltó en plan despedida: “grillinooo”. Me estaban diciendo, que eso que nosotros estábamos descubriendo con el 15M, ellos ya lo conocían de Grillo, desde hacía tiempo.
Acabo de estar viendo la tele, y es inenarrable la alegría que supone ver como una periodista, rodeada por una decena de diputados y senadores del movimento, se dirige a uno de ellos y le pregunta con todo el cachondeíto “Y usted honorable¿en qué trabaja?” y el senador, con su jersey lleno de bolicas y sus treinta primaveras, le dice “yo, informático”. Estos jóvenes educados y normales, han empezado por descojonarse de los honoreboli senatori, las mismas sabandijas que ahí, pero más perfumadas y amaneradas. Todo el movimiento está organizado de forma bastante horizontal. El otro día, el único concejal que tienen en Milán, un chaval de 26 o 27 años, anunciaba que estaban preparando una recogida de firmas para que el ayuntamiento deba asumir de forma vinculante, los refrendums abrogativos y propositivos sin quorum de los vecinos, que los vecinos puedan votar sin necesidad de un representante, sobre los asuntos municipales. En el mismo, mismo Milán. Blanco y en botella.
El movimiento nace formalmente en el 2007, después del éxito cosechado por Grillo con el primer “Vafanculo day” (día de a tomar por culo), y comienza a requerir a través de la web, grupos de ciudadanos, profesionales, amas de casa, parados, etc. sin pasado político, para presentar una candidatura a su ayuntamiento por el Movimento cívico 5 estrellas. Así, llegaron el año pasado a hacerse con el ayuntamiento de Parma, luego con el de Génova y con la región de Sicilia, en una victoria inesperada para todos. Grillo, en aquella ocasión, cruzó, como Musolini, el estrecho de Mesina a nado. Y se llevó Sicilia (¿Son los sicilianos especialmente aficionados a la natación?). También ha caído en alguna trampa, como la de un topillo que montó un número con un periodista poniendo a caldo al número dos, Casaleggio y que fue inmediatamente expulsado (luego se ha demostrado que era un reventador) y alguna declaración desafortunada sobre el conocido grupo neonazi italiano, Casa Pound. Yo en el par de mítines que he estado, he visto algún inmigrante, alguna rasta, mucha gente normal, pero de skins practicantes, na de na. Gente allí parada, con mucho frío, disfrutando de lo que escuchaba y demostrándolo con aplausos. Tampoco le he oído nunca comentarios xenófobos, aunque tengo que decir que me resulta demasiado nacionalista/chauvinista, ni más ni menos que la inmensísima mayoría de sus conciudadanos (aquí, lo que más vende en un super, es el 100% italiano).
Por supuesto, el movimiento tiene aterrada a la casta. Grillo se ha pasado dos meses gritándoles “Rendiros. Estais rodeados”. Y por la cara que ponen, parece que se les ha aflojado el vientre a la mayoría. Grillo ha reunido a todos los vapuleados y desilusionados italianos (unos 8 millones de pobres) sea de derecha que de izquierda, y los ha sacado de estar lamentándose frente a la tele de su casa, a trabajar en la limpieza política de Italia. Los medios los han acusado de todo: que si son el voto protesta (son los más activos allí donde han asumido responsabilidades), que si son la extrema izquierda (decía Berlusconi), que si son la extrema derecha (se oía desde el PD), que si iban a hacer Italia ingobernable (piensan votar ley por ley según su programa y abriendo las instituciones “como una lata de atún”), que si no tienen ni idea de política (por eso han ganado). Por su parte Grillo, ha utilizado su arma más potente, el humor: Monti ha pasado de “Rigor Montis” a “Bin Loden”, Bersani era “Gargamel” y a Berlusconi, ya os he dicho.
Frente a la estulticia política habitual, caras aún más indigestas que los de ahí, Grillo ha estado berreando, con mucho salero, de participación ciudadana en la política, de echar a la casta, de renovables, de limpieza en la administración, de wifi universal y gratis, de transparencia, de cazar definitivamente al pequeño tahúr, de limitar la disparidad de salarios, de salario de ciudadanía, de recortar a los privilegiados para que los menos afortunados puedan subsistir, de bajar la fortísima presión fiscal a la pequeña empresa, de sanidad pública, de reinversión en la escuela pública, de garantizar pensiones dignas, de renegociar la situación con Europa.
Sobre este tema yo tengo una idea particular y es que creo que los alemanes, que no pueden tolerar a Berlusconi, sin embargo con Grillo no tendrían tantos problemas. Lo decía un compatriota de Merkel en un talkshow político de esta noche: “Los alemanes no tienen problema en apoyar económicamente, si deja de tirarse el dinero” y yo diría que más que a la comida de la gente, se refería al ingente caudal que se escapa por las alcantarillas políticas de este riquísimo país. Así pues, si el movimiento consigue arrasar con la podredumbre política, a Alemania le interesa una Italia económicamente vigorosa: el enemigo del nordic way of life es el american way of life ¿no?
Todo por internet. 100%. Se ha negado a conceder entrevistas o debates alegando que eso era ir a jugar a casa del tahur, con todos sus trucos mass media para hacerle parecer lo que no es (explica algún truco de posproducción televisiva con bastante gracia). En el país donde todas las teles son de Berlusconi, lleva veinte años sin pisar un plató. Estuvo muy bueno, un reportero que se le metió en el camper prestado con el que hace las campañas de pueblo en pueblo, y en tres minutos que duró la entrevista, no consiguió colar una pregunta: fue un minimitin y le trató como a un pregonero: le dio con la puerta en la cara. Sólo concede entrevistas a televisiones candienses o suecas o de ese pelo. La campaña ha sido montada y coordinada por voluntarios del movimiento, cambiando un par de salchichones por un lleno de gasoil (uno de sus chascarrillos), durmiendo en casa de amigos, comiendo en casa de simpatizantes. etc. Todo lo que tenía que decir fuera de las plazas, lo dijo por su blog, considerado por no se que periódico guiri, uno de los más influyentes del mundo. Tiene 900.000 seguidores en Twiter. El movimiento tiene un alto porcentaje de ingenieros informáticos, mucho más acostumbrados a los mecanismos horizontales de debate y decisión, propiciados por las redes sociales y con un referente incontestable en lo que se refiere a la capacidad de las personas para organizarse horizontal y meritocráticamente para lograr un objetivo en apariencia inalcanzable, como es Linux contra Microsoft, David contra Goliath.
La estrategia electrónica del movimiento es obra de un discreto personaje con aura de gurú del comercio electrónico y pinta de John Lenon de boda, que se llama Gianroberto Casaleggio. A este le han acusado de que le va el rollo de la astrología. Cualquier día le detienen por filatélico o le pegan por vegano. El caso es que le debe ir lo de la democracia directa, porque una de las cosas primeras que quiere tocar el movimiento, es la ley electoral, otro cachondeo análogo al español.
Otra curiosidad. Van a Proponer a Dario Fo, que por cierto lo vi muy mayor el otro día, aunque ilusionado también, como candidato a presidente de la Republica ¿Molaría, no? Como el ayuntamiento de Reikiavik, pero a lo grande. Nosotros, hasta hace poco, podíamos haber elegido a Saramago para sustituir al rey. No se si nuestra educación ciudadana es mucho peor que la italiana o que aquí les ha tocado el Gordo con barbas, pero si no le da un patatazo o lo envenenan (con el miedo que le tienen) hoy Italia puede haber dado su primer paso contundente hacia su regeneración. Habrá que ver la reacción de los poderes ante la avalancha de ciudadanos budistamente cabreados que se les viene encima.
Por si quedaba alguna duda, lo primero que ha declarado Grillo por teléfono, es lo triste que estaba por el ascenso de Berlusconi. Decía que si volviera a gobernar (se ha quedado a 0’3% de lograrlo) sería un “crimen contra la galaxia”. Su animadversión contra el “nano” tiene muchas dimensiones. (*) Hará algo más de veinte años, el exitoso Grillo, fue contratado para presentar San Remo. Hay que estar aquí para saber lo que es eso. Durante cuatro días no se habla de otra cosa. Pues durante la presentación, soltó un chiste sobre la corrupción socialista que en aquella época estaba en auge con Craxi. El chiste decía que llegaba Craxi a China y preguntaba por los socialistas y el chino le decía que allí todos eran socialistas y Craxi preguntaba “Y entonces ¿A quien le robais?”. Total, que el chistecito le costó entrar en la lista negra y desde entonces Grillo y la tele, no, pues el nano quiere ser el único chistoso de la parrilla.
Otro detalle interesante. Grillo no va al parlamento. No es candidable. Aquí lo aprovechan para recordar que de joven conducía en un accidente con muertos y fue declarado culpable de homicidio involuntario, pero yo estoy seguro de que no se hubiera ofrecido igualmente, porque toda su actuación ha sido la de portavoz del movimiento, con mejores chistes que Berlusca y más credibilidad que Bersani, el Rubalcaba del PD. Curiosamente, Berlusca comparte con el PP, tener las listas llenas de imputados en juicios eternizados por su jefe.
Espero haber sido capaz de transmitir unas pocas pinceladas sobre un sucedido que, por lo que he visto en los mass media españoles, se está tratando de ningunear, como lo de Islandia, por lo de no dar ideas. No estaría mal que el 15M encontrara un Labordeta, con la credibilidad, la capacidad, el valor y la vocación de servicio de Grillo, que como un estandarte, aglutine, que no controle, toda la energía disponible en la gente, evitando que se agote maldiciendo a los ladrones, frente a un plasma.
Salute e buona fortuna!